FIESTAS POPULARES
Hasta mediados de siglo pasado en Grisel se celebraban las fiestas mayores en Septiembre, alrededor del día 24, en honor de Ntra. Sra. de las Mercedes. Se honraba a la Virgen con diversos actos religiosos: auroras, novenas, procesión y Misa Mayor; y lúdicos, donde los bailes y conciertos acompañados por la Banda de Música del pueblo, juegos tradicionales y de pelota mano, y algún año vaquillas, junto a las tradicionales comidas familiares, eran las actividades que ocupaban estos días. Los días 14 y 15 de Mayo también se hacían fiesta en el pueblo, honrando a San Bonifacio y San Isidro, con actos similares, destacando sobre todos ellos los años en que en su honor se celebraba el Dance.
En la actualidad, como en otros muchos pueblos, se celebran las fiestas los días 15 y 16 de Agosto, en honor a la Asunción de la Virgen y San Roque, coincidiendo con las vacaciones que muchos griseleros pasan en su pueblo. Las clásicas actividades de dianas, bailes, almuerzos, ofrenda de flores, comida popular, juegos infantiles, teatro, cine, etc.. llenan las calles en estas fiestas, acompañadas de las actividades que durante todo el mes de Agosto realiza la Asociación Cultural “La Diezma”: talleres de adultos y medioambientales, excursiones culturales, día de la Asociación con comida popular, sorteos, entrega de premios del Concurso de Relato Corto, actuaciones folklóricas, etc...
Durante unos años, la Comarca de Tarazona y el Moncayo y ASOMO (Asociación para el Desarrollo de las Tierras del Moncayo), organizaron los Festivales Tierras del Moncayo, celebrando en cada pueblo de la comarca un día de Feria, alusiva a las tradiciones más arraigadas en cada uno de ellos. En Grisel, contando con la colaboración de la Asociación Cultual “La Diezma” y el Ayuntamiento, se comenzó haciendo varias ferias Medievales y Moriscas. Cambiando la temática en las siguientes ediciones, coincidiendo con la recuperación del Dance de Grisel, por la del Dance, Música y Tradiciones Aragonesas y El Encuentro de Cipotegatos. Durante ese día, coincidiendo o cercano a la festividad de San Jorge, Grisel vive un apretado programa de actos, con la actuación de grupos de Dance invitados junto con el de Grisel, mercadillo con productos típicos en la Plaza, comida popular, música aragonesa con gaiteros y dulzaineros, juegos tradicionales, etc. que se acercan hasta nuestro pueblo, dándolo a conocer, a muchos invitados y visitantes.
SAN JORGE
La tradición de San Jorge en Grisel es curiosa sobre todo por el motivo por el que se celebra esta festividad. Este día no es el santo el motivo de veneración, sino la conmemoración de un hecho acaecido alrededor de un 23 de abril de hace unos 400 años.
Cerca de Grisel se encontraba el pequeño poblado de Samangos, sus habitantes así como los de Grisel, dependían del Cabildo de la Catedral de Tarazona desde mediados del siglo XIV. En 1526 ambos pueblos se encontraba habitados mayoritariamente por moros, más tarde llamados moriscos tras su obligada conversión al cristianismo. La proximidad de ambos pueblos llevó a los pocos habitantes de Samangos, más pobres que sus vecinos, a ir a vivir a Grisel llevándose con ellos todas sus pertenencias e incluso las tejas de sus humildes casas. La tradición relata que el Cabildo obligó a los de Samangos a volver a habitarlo, bajo amenaza de quitarles las tierras y haciendas si no lo hacían, por los que un 23 de abril resolvieron volver, dándoles los griseleros pan y vino con que acompañar la primera comida, saludándose unos y otros en el camino mientras estaban a la vista.
La fecha exacta de la vuelta a Samangos, no se encuentra mencionada concretamente en ningún documento, ya que fueron varias las ocasiones en que se les ordenó volvieran a habitarlo. Existe un acta capitular fechada el 9 de agosto de 1596, dónde el Cabildo manda : “Con todo rigor que vuelvan los vecinos de Samangos” y posteriormente lo hacen los alcaides de Grisel y Samangos en varias actas: 1603 “que no desamparen las casas de Samangos”, 1605 “determinando que en el plazo de un mes retornen o sean desterrados” y el 24 de abril de 1609 “que vuelvan a vivir allí quienes acostumbran a hacerlo”. Esta última fecha es la más cercana al día de la celebración de San Jorge.
Por todo ello el día 23 de abril, festividad de San Jorge, y patrón de Grisel se va en romería a la ermita de Samangos, donde después de oír la Santa Misa se trae en procesión a la Virgen de las Mercedes recorriendo los caminos que llevan a Grisel, hasta llegar al alto del calvario cercano al pueblo, desde cuya iglesia ha salido otra procesión con la Virgen de la Huerta. Se encuentran a la altura del “juego”, los abanderados que presiden ambas procesiones se saludan con la bandera y el pendón realizando las llamadas “cortesías”, tras el saludo de los sacerdotes que las acompañan y al son de la música procesional llegan a la plaza donde ante todo el pueblo reunido y con las peanas portando ambas vírgenes presentes, en la puerta de la iglesia, repiten las mencionadas “cortesías” que tanto llaman la atención a quien acude por primera vez a Grisel este día. A continuación en el Ayuntamiento se reparte la tradicional “culeca” y se entrega un litro de vino a cada vecino en recuerdo del que dieron los griseleros a sus vecinos de Samangos.
Hasta hace unos años, a mitad camino de vuelta de la ermita, el alguacil pasaba lista a los vecinos que habían ido a oír misa, y luego una vez en el pueblo solamente éstos tenían derecho al litro de vino, salvedad hecha de las viudas y los enfermos. Los más pequeños acudían a misa con la “culeca”, torta hecha de pan dulce con un huevo duro en el centro, donde tras ser bendecidas eran repartidas entre toda la familia. Aquel día la comida era especial y por la tarde se bailaba en la plaza donde se daba de beber vino de una “tineta” a todo el que lo deseaba.
Los últimos años al ser festivo por coincidir con el Día de la Comunidad Autónoma de Aragón, la celebración de San Jorge se ha visto impulsada con la asistencia de muchos griseleros que se encuentran fuera de su pueblo, y más recientemente, con la celebración de las Jornadas Culturales San Jorge organizadas por la Asociación Cultural “La Diezma”. Asimismo desde su recuperación el grupo de Dance acompaña con varios pasacalles a las procesiones y también se ha representado varios años el Dance completo en honor a San Jorge.
EL DANCE
Desde la Asociación Cultural “La Diezma” se ha impulsado la recuperación del Dance de Grisel que tras casi cincuenta años sin representarse, y dos años de ensayos y preparativos, el pasado 23 de Abril de 2006 pudo volverse a ver completo en honor de nuestro patrón San Jorge. Nuestro Dance es de tipo “pastorada” con Mayoral, Rabadán, Ángel, Diablo, Cipotegato, y ocho danzantes, aquí llamados paloteadores. Para su recuperación tanto de la música como de las mudanzas contamos con la colaboración de varios de los músicos y paloteadores que lo hicieron por última vez en 1958. Se confeccionaron todos los trajes e indumentarias según los modelos que aparecen en las fotografías que se conservan de los Dances celebrados en 1917, 1927 y 1958. También para los textos del Dance se emplearon manuscritos antiguos escritos por D. Sancho Bailo Tejero, el más antiguo de ellos fechado en 1898. Se volvió a representar completo los años 2007 y 2008, y ha estado presente en la Ofrenda de Flores para el Pilar en Zaragoza, en Expo Zaragoza 2008, en La Almunia de Doña Godina en varios Encuentros de Diablos y en Gallur, en el XIV Encuentro de Dances Villa de Gallur.
El interés de la A.C. “La Diezma” por la recuperación del Dance comenzó en 1994, las II Jornadas Culturales San Jorge estuvieron dedicadas a este tema, con la intención de comenzar a estudiar su recuperación. Invitando al grupo de Dance de San Bartolomé de Borja y realizando una exposición sobre los últimos Dances de Grisel, con el traje del Mayoral, los palos de paloteador, la espada del diablo, junto a una amplia colección de fotografías antiguas, de las representaciones y dichos de los dances de 1918, 1927 y 1958. Pero la recuperación no prosperó entonces, quedando todo en un intento fallido, e incluso el interés por el mismo se aletargó hasta unos años después.
Volvió a revitalizarse en Julio de 1998 con la Exposición que se realizo en el Monasterio de Veruela sobre Dances Tradicionales en el Somontano del Moncayo, donde Grisel estuvo representada con la abundante documentación cedida por nuestra Asociación Cultural, y que luego pudimos ver en el Castillo de Grisel en Agosto de aquel mismo año. A raíz de ello varios miembros de la Asociación Cultural y Etnologica “La Colodra” de Tarazona visitaron Grisel en el verano del 2000 con la intención de recuperar el Dance, recabando información entre los antiguos paloteadores y músicos del pueblo. En el 2001 y dentro de las IX Jornadas Culturales San Jorge, invitamos al grupo de Danzantes de Ambel, que exhibieron varias mudanzas de su Dance en la Plaza de la Iglesia después de las cortesías. De nuevo se encendió la chispa y comenzó a correr el gusanillo entre los antiguos paloteadores, pero nadie dio el paso adelante ni coordinó el tema para comenzar una recuperación en serio y de nuevo se perdió una buena oportunidad de poder hacerlo. De la mano de la anteriormente citada A. C. “La Colodra” de Tarazona, en el verano del 2003 varios músicos de Grisel interpretaron en la Plaza de Toros Vieja de Tarazona, dentro del encuentro de música tradicional CALIBS, varias mudanzas del paloteado según las partituras antiguas recuperadas.
Y así llegamos hasta el verano del 2004, donde en la Asamblea anual de nuestra Asociación Cultural se lanzó la idea de intentar recuperar de una vez por todas el Dance, proponiendo reunir a los antiguos paloteadores con los que estuvieran interesados en volver a hacerlo, para cambiar impresiones y entre todos poco a poco comenzar a trabajar en la definitiva recuperación de esta seña de identidad del patrimonio cultural de nuestro pueblo. Esta fue la ocasión buena, pudiendo coordinarse un grupo de personas interesadas en el Dance, y se volvieron a bailar sus mudanzas y representó tras casi cincuenta años sin hacerse.
Asimismo, el pasado 23 de Abril de 2009, fue presentado en Grisel por sus autores: Ramón Alcaine Baquedano y Manuel Lozano Magallón el libro “El Dance de Grisel”. En el se recopila toda la información que sobre el Dance se encontró durante el proceso de recuperación: fotografías, textos, músicas, etc..., junto a la descripción de la indumentaria y accesorios, las mudanzas, actuaciones y textos recientes, partituras musicales, etc., acompañado de casi doscientas fotografías que hacen al libro muy visual; una obra hecha con mucho esfuerzo y cariño por sus autores, con la esperanza de que el Dance continúe vivo.